Más de un centenar de comerciantes y locatarios del mercado de Abastos Tirso de Molina se reunieron con el alcalde Daniel Jadue, para conocer de primera fuente las medidas que la autoridad implementará en este comercio y la forma en que operará bajo esta nueva administración comunal.
En un diálogo franco y en que no se eludió ningún tema, el jefe comunal fue claro en señalar que, entre otros motivos, este encuentro tenía por finalidad ponerle fin a «la campaña del terror» que se había generado en este mercado y terminar con «los engaños y las mentiras» que se les han dicho por muchos años a los comerciantes.
«A la Tirso de Molina yo, como alcalde, le llamo la gran mentira. Porque, el Tirso de Molina, y ustedes lo saben bien, está construido sobre un bien nacional de uso público cuyo uso de suelo es área verde. De ahí para adelante, todo los que les han prometido como vender locales y hacerse de la propiedad, han sido grandes mentiras. Y ustedes comprenderán que yo puedo querer ayudar, pero que no soy responsable de las mentiras de otros», precisó el alcalde Daniel Jadue.
La autoridad comunal también indicó que existen situaciones irregulares que no está dispuesto a aceptar. En este sentido, señaló que no va a pagar las contribuciones de este edificio, ya que la propiedad no es municipal y tampoco deben pagar los locatarios. Además, indicó que el edificio no podrá tener permiso ni recepción final, porque «una obra comercial no puede tener permiso de construcción sobre un terreno que es para área verde y como no puede tener permiso, menos puede tener recepción final», aclaró Jadue.
Otro de los temas que abordó es la situación interna del mercado, expresando claramente que va ser implacable con las personas que están abusando de la situación que se ha generado, especialmente en lo referido a los arriendos de locales y la regularización de las suplencias.
«Esta es una nueva administración y una nueva forma de entender, yo no vengo a cobrar venganza y lo que me interesa es que hagamos lo justo y lo correcto. Salvo argumentadas excepciones, el espacio público de Recoleta es para la gente de la comuna. Por lo tanto, los permisos que se entreguen en la vía pública de ahora en adelante serán para los habitantes de la comuna», enfatizó el alcalde.